El director para las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, explicó en SEMANA en vivo que si el exjefe paramilitar se queda en Estados Unidos, no tendría ningún incentivo para colaborar con Justicia y Paz y reparar a las víctimas.
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Las más interesadas en que el exjefe paramilitar Salvarore Mancuso vuelva a Colombia son las víctimas. En las últimas horas se conoció que Estados Unidos suspendió el trámite para deportar a Mancuso a Italia, decisión que tiene posibilidad de apelación, y que por tanto, podría ser deportado a Colombia, lo cual la defensa del exjefe paramilitar está tratando de evitar alegando problemas de seguridad.
En el caso de Mancuso hay discusiones de forma y de fondo, por ejemplo, ¿parte de la responsabilidad de que el exjefe paramilitar no vuelva a Colombia sin mayor trámite es del Gobierno que lo extraditó a Estados Unidos o del que ahora lo solicita, es decir, del expresidente Álvaro Uribe o del presidente Iván Duque?
“Los errores pudieron haber comenzado cuando Colombia extraditó a Mancuso a Estados Unidos, con una precisión, Colombia tampoco tiene tratado de extradición con EE. UU., las cuales se tramitan por los códigos de procedimiento penal colombianos”, aseguró el exmagistrado Yesid Reyes.
En Colombia el presidente de la República puede recurir a la extradición diferida, con la cual se envía a la persona al otro país cuando termine de pagar la pena en Colombia, lo cual no ocurrió en el caso de Mancuso; y por otro lado está la extradicción condicionada, que según explica el exmagistrado indica que se puede entregar al país requirente con condiciones, una muy usada, es que en cuanto “termine de pagar la pena en su país me lo regresa”.
Al respecto, Reyes plantea dos escenarios, el primero que en 2008 el entonces presidente Álvaro Uribe incluyó la condición y no la está cumpliendo el presidente Duque; y la segunda, que Uribe como presidente “no lo incluyó y el error es de él”. Sin embargo, aún así, el exmagistrado asegura que un camino más sencillo para que Mancuso vuelva a Colombia es recurrir a la deportación, tal como lo hizo Italia.
Según Vivanco, la responsabilidad de que esa condición no se cumpliera es de Uribe porque no la habría solicitado en su momento. “El presidente Uribe no lo hizo así, acá el Departamento de Justicia (de Estados Unidos), las autoridades competentes, dieron vuelta a todo para encontrar algo que les permitiera invocar un compromiso entre el gobierno del presidente Uribe y la administración Bush, y no encontraron nada. No hay nada que le hubiera permitido a los Estados Unidos regresar a Mancuso sobre esas bases, por lo tanto era necesaria una nueva solicitud de extradición”, explicó.
Por tanto, dice Vivanco, extraditaron a Mancuso sin las garantías de que “una vez cumplida la pena volvieran”, para reparar a las víctimas del paramilitarismo. Además, señala que en caso de que el gobierno colombiano no logre que Mancuso regrese al país, él quedará libre en Estados Unidos sin obligación de colaborar con la justicia colombiana. «Si Mancuso se queda en la Florida y no regresa a Colombia, no tiene ningún incentivo para colaborar con la justicia y Paz», aseguró.
Ahora bien, el argumento de la defensa de Mancuso es justamente que él no tendría garantías de seguridad si vuelve a Colombia, ese es para Vivanco el quid del asunto, porque de un eventual compromiso de Colombia dependería que Estados Unidos accediera. “Hoy día están evaluando si hay condiciones para que Mancuso pueda regresar a Colombia y su vida no corra riesgos y tampoco corra riesgo de ser maltratado, torturado, si el gobierno colombiano no se mueve con todo para garantizar a EE.UU. que corre por cuenta del gobierno de Colombia la seguridad de Mancuso para que pueda seguir colaborando en las causas de justicia y paz y otras centenares de masacres no creo que regrese a Colombia”, explicó.
fuente: https://www.semana.com/