El grupo terrorista Hamas sigue bombardeando a civiles en Israel: al menos diecinueve heridos por cohetes lanzados desde Gaza

Los cohetes disparados desde Gaza el martes por la mañana impactaron directamente en al menos dos edificios en la ciudad de Ashkelon, en el sur de Israel, y dejaron a 19 personas heridas.

Cuatro de ellas son miembros de la misma familia: el padre, de 40 años, se encuentra en una condición de moderada a grave luego de un golpe en la cabeza; la madre, de 39 años, se encuentra en estado moderado; y los dos niños, de 6 y 12 años, resultaron levemente heridos.

Uno de los edificios atacados en Ashkelon (REUTERS/Amir Cohen)

La mujer contó a medios israelíes que ella y su esposo estaban “acostados en los pasillos y los niños en los colchones” cuando sonaron las sirenas. “Hubo muchas explosiones y el techo de yeso se derrumbó, y luego vi que los niños estaban heridos. Mi esposo gritó para ‘ayudarme’ y no pude alcanzarlo porque el techo se había derrumbado”. Cuando logró llegar hasta él, lo vio “cubierto de sangre”.

Médicos atienden a un hombre herido en el ataque palestino en Ashkelon (REUTERS/Amir Cohen)

El Centro Médico Barzilai en Ashkelon informó que una persona fue ingresada en estado grave, otra en una condición moderada, y otros 17 pacientes más con heridas leves.

Bomberos israelíes apagan el incendio en un auto alcanzado por un cohete palestino en Ashkelon (REUTERS/Nir Elias)

Un hombre de 63 años y una mujer de 82 años también figuraron entre los heridos leves.

(REUTERS/Amir Cohen)

Siete personas más están recibiendo tratamiento por trauma, agregó el hospital.

En total, los movimientos terroristas, Hamás y Yihad Islámica, lanzaron más de 200 proyectiles hacia Israel, desde las 3.00 GMT de este lunes, por las tensiones registradas en Jerusalén, que continuaron de madrugada y se extendieron con protestas a Cisjordania y comunidades árabes de Israel.

Varias propiedades en Israel han sido dañadas por cohetes, incluidos los edificios en Ashkelon y una casa en Beit Nekofa, al oeste del centro de Jerusalén.

El edificio residencial dañado en Ashkelon (REUTERS/Amir Cohen)

El brazo armado de Hamás, las Brigadas Qassam, prometieron convertir a Ashkelon en “un infierno”.

Otro edificio dañado en Ashkelon (REUTERS/Ilan Rosenberg)

El lanzamiento masivo de cohetes desde el enclave palestino también hicieron sonar las alarmas antiaéreas en la Jerusalén por primera vez desde 2014.

No obstante, el 90% de los cohetes lanzados desde Gaza fueron interceptados por el sistema de defensa israelí, Cúpula de Hierro, informó un portavoz militar.

El sistema Cúpula de Hierro intercepta los cohete lanzados desde Gaza (REUTERS/Nir Elias)

Tras la agresión, Israel respondió lanzando anoche la operación “Guardianes del Muro”. Los bombardeos israelíes contra objetivos de las milicias armadas en el enclave elevaron al menos a 24 los muertos palestinos en la franja. Según el gobierno controlado por Hamas, entre ellos hay nueve menores.

El Ejército israelí “no confirmó ni negó” que la muerte de civiles fuera consecuencia de los bombardeos pero afirmó que los ataques selectivos contra milicianos de Hamás y la Yihad Islámica dejaron 15 muertos y que un tercio de los disparos de las milicias fallaron y cayeron en misma franja, “causando víctimas”. El segundp de estos grupos confirmó la muerte de dos de sus líderes durante las operaciones.

Israel ha atacado hasta el momento 130 objetivos, entre ellos “dos túneles ofensivos adyacentes a la valla de seguridad”, fábricas de armas y operativo, y esta noche bombardeó también en viviendas de dirigentes de Hamás, detalló Jonathan Conricus, portavoz militar.

Estos lanzamientos, considerados para Israel “una línea roja”, han disparado la tensión y la violencia entre palestinos e israelíes que durante la madrugada se extendieron por numerosos puntos de la región con disturbios y protestas.

(Con información de EFE, AFP)