El anillo del Papa puede transmitir gérmenes a quienes lo besan?

El lunes 25 de marzo en el marco de la visita a Loreto —Italia— el Papa Francisco retiró la mano de los devotos que pretendían besar su anillo. Esta acción se extendió a través de un video y causó revuelo a nivel mundial. El vocero del vaticano, Alessandro Gisotti, explicó que simplemente fue una cuestión de higiene, para no propagar gérmenes. Además dijo que al sumo pontífice le gusta abrazar a la gente y que la gente le abrace, pero también teme que se enfermen.

Esta acción es un simple paso por evitar que se propaguen agentes podrían dañar la salud de los feligreses. Existen varios estudios que nos muestran dimensiones reales de cuantos gérmenes puede tener la joyería que portamos, pero primero debemos comprender que son estos agentes.

Los gérmenes son microorganismos, es decir, sistemas biológicos que solo pueden visualizarse a través instrumentos especializados como microscopios.

Dentro de esta gama, existen cuatro tipos principales: las bacterias, los virus, los hongos y los protozoos. Estos tienen la capacidad de invadir plantas, animales y personas. Aunque algunos de estos agentes son buenos para mantener la salud,existen otros más que provocan enfermedades.

El estudio Impact of finger rings on transmission of bacteria during hand contact de 2009, realizado a colaboradores sanitarios en Noruega durante su labor clínica rutinaria, reveló que existe una carga bacteriana significativamente mayor y más bacterias transmitidas en relación con personas que portan anillos en las manos.

La investigación analizó a 100 trabajadores que portaban este accesorio y otros 100 que no lo hacían. Las conclusiones del estudio señalaron que el uso de anillos de dedo aumenta la tasa de transporte de bacterias en las manos de los trabajadores de la salud.

Un trabajo parecido lo realizaron las enfermeras del The Heart Hospital Baylor Plano —THHBP— en Texas —Estados Unidos— con el fin de crear conciencia sobre el uso de joyería en profesionales de la salud.

Sus análisis revelaron que el 20 por ciento de los anillos enjoyados portaban una gran cantidad de bacterias dañinas. Una de ellas fue el Staphylococcus aureus resistente al fármaco meticilina —SARM—, responsable de infecciones difíciles de tratar.

Estos estudios reflejan que, aunque los subalternos del sector salud se mueven dentro de un ambiente lo más controlado posible, existen microorganismos que se propagan por la joyería que utilizan.  

Debemos ser conscientes de que los gérmenes se expanden por más medios y por ello el primer paso para evitar su propagación es la prevención. La acción de Papa Francisco frente a la gran cantidad de fieles que quedaban expuestos a enfermarse es parte de impedir que se propaguen estos agentes.

El tema de transimisión de gérmenes de las manos es tema ampliamente estudiado: según la ONU en países en vías de desarrollo podrían salvarse un millón de vidas si su población se lavase las manos con jabón. Con este sencillo gesto se contribuye a evitar un sinfín de enfermedades como la neumonía y la diarrea, las dos primeras causas de mortalidad infantil menores de cinco años en el mundo. La Organización Mundial de la Salud —OMS— da las siguientes pautas para realizarlo correctamente.